Luego de pasar la noche en el Parque Provincial Ischigualasto haciendo carpa, el día 12 tomaremos rumbo al oeste por la RN 150. Luego de cruzar las Sierras del Valle Fértil con las múltiples vueltas de la ruta en esa parte, llegaremos, en el km 85 a la unión con la ruta 40 hasta su separación en el km 119. Ahí si, tomaremos hacia el sur.

La vía, siempre solitaria, nos hará pasar por Niquivil, Tucunuco, Talacasto y Matagusano hasta llegar, en el km 265, a la ciudad de San Juan, capital de la provincia.

En nuestro plan original teníamos como idea dormir acá, pero en sucesivas revisiones decidimos tomar a la capital sanjuanina sólo como punto intermedio para estirar las piernas. Con seguridad nos vamos a hacer un momento ahí para recorrer algunos puntos de interés.  

Luego nos volveremos a subir al auto para continuar viaje hacia el sur. Primero nos cruzaremos con las localidades de Villa Krause, Carpintería, Colonia Cantoni, Media Agua y Tres Esquinas hasta llegar, en el km 343, al cruce hacia la provincia número 10 de esta aventura: Mendoza.

Desde ahí, la soledad de la ruta irá disminuyendo ya que nos estaremos acercando a la capital mendocina, a la cual llegaremos luego de unos 433 km y unas 6 horas de viaje neto. 

Y será acá donde tendremos, al día siguiente, nuestro tercer descanso. Aprovecharemos para recorrer algunos lugares de una ciudad que sabemos que es muy grande y para la cual se necesitaría una visita específica.

Mendoza, por alguna razón, se siente como la “mitad psicológica” del viaje. Pero va a ser solo una sensación. A esta altura estaremos recién en el 40% del viaje. Y luego de descansar, seguiremos. Neuquén nos espera…