En el #tbt de hoy hablaremos sobre el Cerro de los Siete Colores. Estando a 1750 km de casa y luego de recorrer las calles y la feria de Purmamarca, almorzar la comida más rica (hasta ese momento, al menos) y recorrer el Paseo de los Colorados, llegamos al lugar quizás más representativo de esta localidad: el Cerro de los Siete Colores.
Para verlo en todo su esplendor subimos caminando a un pequeño mirador llamado Cerro El Porito en donde nos cobraron una colaboración de $10 (unos 20 centavos de dólar en ese momento) para acceder a él. Desde ahí pudimos observar toda Purmamarca y varios cerros circundantes, entre ellos el famoso Cerro de los Siete Colores. Declarado como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO se lo reconoce por sus líneas multicolores: blanco (piedra caliza), amarillo (areniscas de azufre), marrón (plomo y marga), pardo (manganeso), rojo (arcilla con hierro), rosa (arcilla roja) y verde (óxido de cobre).
Es una vista muy bonita, pero no olviden mirar para el otro lado. Hacia el norte, más allá de la RN 52 y el Río Purmamarca, el Cerro El Morado, con sus 2900 msnm, nos mira imponente. Y hasta parece que nos dijera “yo también tengo varios colores, no me ignoren”. Así que también les dejamos una foto de él. 🙂
En esos momentos las nubes comenzaban a amenazarnos. Teníamos que seguir viaje. Nos quedaba poco para llegar a nuestro destino del día… Pero, ¿llegaríamos antes que la lluvia? Mmmm…