Cuando estemos terminando el día 10 estaremos llegando a Chilecito, en la provincia de La Rioja. Habremos recorrido un poco más de 3300 kilómetros cuando podamos descansar en la ciudad riojana. 

Ubicada en la zona norte de la provincia, entre las sierras de Velasco y Famatina y a 1080 msnm, cuenta con una población de casi 35.000 habitantes.  

La zona era conocida en escritos de 1700 como Puerta de Chile. Fue fundada en 1715 como Villa Santa Rita, pero luego su nombre cambió a Villa Argentina y luego a Chilecito. Pero su nombre no nos queda claro de dónde viene. Para algunos proviene de la palabra chileoito o chiloe que significa “tierra roja”, para otros, de la palabra aymará chill que significa “fin del mundo” o “zona alta” y para algunos otros es debido a la cantidad de mineros de origen chileno de las minas en la zona. Muchas definiciones distintas y disímiles. 

La ciudad cuenta con variedad de lugares de interés para el turista: las bodegas, el Museo Molino de San Francisco, el Museo Aborigen Chirau Mita, la Capilla de Nuestra Señora de la Merced o la Tambería del Inca.

Pero quizás uno de los puntos más conocidos sea el Cable Carril Chilecito-La Mejicana. Éste se utilizaba para transportar minerales que se extraían de la mina La Mejicana, en el cerro General Belgrano. Funcionó entre 1904 y 1929 y en 1982 fue declarado Monumento Histórico Nacional. Tiene 32 km de largo, 650 vagonetas, 262 torres y 9 estaciones intermedias las cuales estaban acondicionadas para descansar y re aprovisionarse. Funcionaba a vapor y llegaba a una altura de 4600 msnm. Su cierre se produjo debido a la crisis económica mundial de 1929.

Es una lástima que estemos en Chilecito en noviembre, ya que nos perderemos La Chaya: una celebración ancestral de agradecimiento a la Madre Tierra que se realiza durante febrero y que, dicen, se caracteriza por sus colores, su música y su alegría generalizada. Una pena. Tendremos que volver específicamente en otro momento para conocerla. 

Pero mientras tanto, a descansar. Al día siguiente nos espera la Cuesta de Miranda, Talampaya, Ischigualasto… 

Y más allá, mucho más…